Piso de Alquiler
Este piso, situado en una zona pegada a la Universidad, pedía a gritos un cambio radical. Sus dueños habían ido alquilándolo en su estado original, hasta que decidieron que era momento de invertir en su reforma y sacarle rentabilidad.
Pequeño, pero funcional y muy bien situado, es el «novio» perfecto para el alquiler de éxito. Y con ese objetivo nos pusimos a transformarlo, creando una amplia zona común, práctica para el día a día y preparada para las ocasiones esporádicas.
La primera impresión al abrir la puerta es perfecta, porque con una sola vista, se ve el piso por completo. En espacios reducidos donde la luz y la amplitud visual juegan la mejor baza, el resto de detalles tan sólo acompañan.
De esta manera empezamos por la parte más importante en un piso a compartir. La mesa extensible de comedor en madera conecta salón y cocina separando el espacio sin molestar. Mobiliario en tonos claros evitando en todo momento recargar los ambientes y crear sensación de agobio. Zona de estar con mueble de televisión en blanco. Cocina fabricada a medida de melamina en tonos beige creando contraste con la pintura de las paredes. Pared frontal empapelada para darle cierto protagonismo y aportar mejores acabados.
Baño pequeño, con buena luz y espacio suficiente para sentirse cómodo en él. Los tres dormitorios, con puerta corredera para facilitar la movilidad y tratados de la misma manera, contienen cama con mesilla, un armario de amplia capacidad y un escritorio. Camas vestidas en distintos colores, pero pensadas para coordinar los espacios entre sí.
Se ha mantenido un estilo común, jugando con los textiles para que cada uno transmita su propio carácter. El de mayor espacio, permitió incorporar una cama nido con opción a su uso doble.
El resultado…piso coqueto y muy práctico. Destinado a estudiantes o familias con ganas de disfrutar del tiempo juntos…